Aunque desde hace ya varias horas las precipitaciones no descargan ni sobre la ciudad de A Coruña ni sobre las localidades por las que transcurre el Rallye Rías Altas, la sexta especial sorprendió a algún que otro piloto con muchas humedades y suciedades a lo largo de los once kilómetros. En línea de meta la mayoría de pilotos coincidían en que no era tarea fácil saber cuándo se podía ir con ritmo de seco y cuándo no.

Xesús Ferreiro sumó un nuevo scratch -el tercero en lo que va de competición- por la mínima. Pues Antonio Sainz empeoraba sólo en cuatro décimas su crono. Y eso que en el anterior tramo pinchó y, cuando cambió la rueda, se dio cuenta que llevaba montado compuesto de seco y la de repuesto era de agua. Comentó que no se había sentido nada cómodo porque, con esa accidental monta de gomas, el comportamiento del coche no era el deseado.

Tercero, abriendo ya una brecha de algo más de ocho segundos, encontramos a Francisco López y Miguel Peña con su Ford Escort RS 2000 MKI. Cuarto fue Juan R. Costoya, quien cedió 9,2 segundos con el mejor tiempo del tramo, a pesar de que aflojó el ritmo por algún extraño ruido en su Ford Sierra Cosworth 4×4.

El Ford Escort RS 1800 MKII de Ferreiro fue el mejor vehículo de Pre 81 por delante de los RS 2000 MKI de Francisco López -segundo- e Ignacio Martínez – tercero.

En Pre 90 primero fue Antonio Sainz y Juan R. Costoya, segundo. Y Manel L. Castrillón consiguió marcar el tercer mejor registro.

En Categoría 5 Javier López continuó con su dominio particular. Lo hizo endosando más de cuarenta segundos a Marco López y Fernando Vilela, segundo y tercero por este orden.

Dentro de Yountigmer, la pareja local formada por Daniel Anido y Adrián Núñez fue la que menos tiempo empleó para completar el tramo. Los siguieron los Daniel Lamas y Daniel Gandoy.

Ramón Martínez: Está bastante delicado. Hay por ahí zonas mojadas que no te las esperas. Sobre todo la zona de los árboles.

Xesús Ferreiro: Está complicado. Hay humedades y coges el ritmo de seco y de repente te encuentras zonas delicadas. Además en la zona final el coche no tracciona nada.

Miguel A. Sánchez: En un cruce me pasé, hice un recto y le tiré del freno de mano. Está muy embarrado y tardamos una hora en salir de allí. Vinimos con buen ritmo pero la gente corre y nosotros corremos lo que podemos.

Pablo Rey: Bien. La verdad es que está más delicado que el anterior pero bien. Ya estamos disfrutando.