Después de que el primer tramo de esta quinta edición del Rallye Rías Altas fuera neutralizado, cuando los relojes apenas habían marcado las diez de la mañana, arrancaba la acción en Monfero. Una especial que con más de 18 kilómetros es la más larga de la prueba y en la que, ahora sí, todos los participantes pudieron tomar la salida y demostrar qué son capaces de hacer delante de los miles de espectadores que están en las cunetas, “muy bien colocados”, en boca de Ernesto Rumbo, una vez más piloto del coche 0, y que no ha escatimado en elogios hacia ellos. “El público, como en Doroña, espectacular. ¡Enhorabuena! Lo bien que se están colocando da una confianza tremenda a los que venimos dentro”.
Más allá de esto, centrándonos ya en la parte competitiva, el mejor tiempo absoluto de la especial acabaría en manos de Xesús Ferreiro, al volante de su habitual y potente Ford Escort RS 2000 (MK II). Y de esta manera, el de Melide sería el más rápido en Pre 81 y el Tour European Rally Historic, por delante, en ambos casos, de Francisco López, segundo en la tabla conjunta de tiempos y que perdería prácticamente una docena de segundos con su Ford Escort RS 2000 (MKI).
Tercero en los registros de Monfero encontramos ni más ni menos que al piloto local Juan R. Costoya, primero a efectos de Pre 90, donde el podio lo completaron Gelo Sánchez y Miguel A. García.
En cuanto a la categoría 5, nadie pudo hacer frente a Luis Penido, que aprovechó la mecánica 4×4 del Mitsubishi Lancer Evo VI para dejar más allá de los treinta segundos a Fernando Rico, segundo, en esta ocasión pilotando un BMW M3.
A. Sainz: “Muy mal. En el primer cruce nos hemos ido recto y hemos tenido que buscar un sitio por donde salir. Medio minuto calculo que he perdido y me ha extrañado que no nos haya pillado ningún coche”.
X. Ferreiro: “Bien. La verdad es que el tramo estaba bastante seco excepto algunas zonas húmedas por el medio, pero llevan así toda la vida”.
M. Castrillón: “Muy bien. Aprendiendo a conducir el coche otra vez. La gente muy bien. En el Monasterio había mucha gente pero toda bien colocada y arriba en la Visura igual. Luego en el resto del tramo ya no hay tanta”.
R. Gandoy: “Espectacular. El tramo está para correr. El Citroën Visa se va portando bien e intentar acabar, a ver qué pasa el resto del día. Gracias a unos amigos que me han dejado el coche y la verdad es que nunca ha acabado una carrera, así que a ver si somos capaces de que sea hoy”.
C. Díaz: “Todo un desastre. Salimos con problemas de calefacción y al poco de salir nos quedamos sin dirección asistida. Ahora perdimos el tubo de escape bajando los rasantes… ¿Qué más quieres que te cuente?”.